Luego de haber depositado 400 millones de pesos (su equivalente en dólares) en el Banco Ciudad y de que le colocaran una tobillera electrónica, el ex gobernador José Alperovich, condenado a 16 años de prisión por abusos sexuales, fue trasladado ayer desde el penal de Ezeiza a su departamento en Puerto Madero, luego de que la Justicia accediera al pedido de prisión domiciliaria que hicieron sus abogados. En el medio, quien fuera uno de los hombres más poderosos de la provincia, pasó 379 días en un pabellón destinado a condenados por delitos sexuales. A partir de ahora deberá cumplir con una serie de medidas impuestas por el juez Juan María Ramos Padilla, so pena de tener que volver a la cárcel. No puede salir de la vivienda sin comunicarlo al juzgado y además tuvo que entregar su pasaporte como una medida para evitar una posible fuga.
El 18 de junio del año pasado, Alperovich fue condenado tras un juicio, que duró cuatro meses, a raíz de la denuncia que había radicado una ex colaboradora, familiar suya, quien dijo haber sido agredida sexualmente nueve veces entre diciembre de 2017 y los primeros meses de 2018. Ese tiempo, y durante varios meses más, ella estuvo colaborando con el entonces senador en la campaña política, haciendo las veces de secretaria privada.
La resolución del magistrado, que permite a Alperovich cumplir prisión domiciliaria en su inmueble porteño, se fundamenta en varios puntos clave que fueron analizados minuciosamente durante la audiencia en la que se aceptó el pedido del abogado Maximiliano Rusconi. Entre los argumentos principales esgrimidos por la defensa y aceptados por el juez se encuentra la necesidad de garantizar el acceso a una atención médica especializada que, según los letrados del ex mandatario, no podía ser provista de manera adecuada en el ámbito penitenciario, aunque esto fue contrario a lo que dijeron los especialistas médicos del penal. La salud de Alperovich, un factor determinante en la decisión, fue presentada con informes médicos detallados que daban cuenta de afecciones preexistentes y la complejidad de su tratamiento.
Efectivizaron la prisión domiciliaria a José Alperovich: cuáles son las condiciones impuestas por la JusticiaOtro aspecto crucial de la resolución fue la edad avanzada del imputado. Ramos Padilla consideró la edad de Alperovich como un elemento a tener en cuenta en el marco de la normativa vigente que contempla la posibilidad de la prisión domiciliaria para personas mayores, especialmente cuando se presentan complicaciones de salud. Alperovich ya cumplió 70 años. La defensa hizo hincapié en que el riesgo de fuga se ve disminuido por estas condiciones, sumado a la imposibilidad de entorpecer la investigación desde su domicilio, dada la avanzada etapa de la causa.
Situación familiar
El juez también evaluó la situación familiar del ex gobernador, considerando el impacto que su detención ha tenido en su entorno más cercano. Si bien este punto no fue el predominante, sumó al cúmulo de argumentos presentados para justificar la medida. No obstante, la decisión no estuvo exenta de condiciones estrictas. Alperovich deberá llevar una tobillera electrónica para monitoreo constante; se le prohíbe el contacto con testigos y víctimas de la causa, y tiene vedada la salida de su domicilio salvo expresa autorización judicial para asistir a turnos médicos debidamente comprobados.
“La prisión domiciliaria no es un beneficio excepcional ni un acto de clemencia, sino una herramienta legal que se aplica bajo condiciones muy específicas”, señaló Ramos Padilla en los fundamentos de su decisión.
Además, fue enfático al recordar: “Espero que Alperovich comprenda que el poder y el dinero no alcanzan para garantizar impunidad”.
Durante el proceso, la defensa del ex mandatario solicitó en dos oportunidades morigerar su detención, pero ambos pedidos fueron rechazados por el tribunal y luego ratificados por la Cámara de Casación Penal.
Si Alperovich incumple alguna de las medidas que se ordenaron, volverá a la cárcelLa fiscalía, representada por Sandro Abraldes, se encuentra analizando la resolución para determinar si presentará una apelación, lo que podría abrir una nueva instancia de discusión en la Cámara de Apelaciones. Por lo pronto, Alperovich pasará sus días en Puerto Madero, bajo un estricto control, pero fuera de los muros de Ezeiza.
Según se supo, en los últimos días, sus hijos viajaron a Capital Federal y lo visitaron en la cárcel para hacerse cargo de los preparativos antes del traslado. Ramos Padilla había rechazado la pretensión de que fuera alojado en un country de la provincia de Buenos Aires y que había sido puesto a disposición por el entorno familiar. El departamento en el que quedará detenido en cuestión es el mismo en el que la víctima fue violada, en dos ocasiones, según el relato que realizó frente al juez y las partes durante el juicio.
A pesar de haber obtenido el beneficio de la prisión domiciliaria la batalla legal del caso aún no termina ya que la sentencia está en manos de la Cámara Nacional de Casación Penal por haber sido apelada por la defensa, y seguramente con posterioridad llegará a la Corte Suprema de Justicia, donde se determinará si el fallo queda o no firme.